29/4/08

Llamadas gratis entre Simyo

Lo único que no me gustaba de Simyo (y me dí cuenta tarde) es que sólo te admitían una promoción pioneros por titular. En mi caso tengo tres números de teléfono con Simyo (mi esposa, yo, y una línea que sólo uso para datos).

Hoy he recibido un correo (y lo he confirmado llamando al 121) en el que se anuncia que a partir del 7 de Mayo las llamadas entre Simyo son gratis los diez primeros minutos. Aunque no tengas promoción. Me parece una oferta estupenda.

Con esta tarifa ya tengo convencidos a mis padres y algunos de mis hermanos

¿Cómo funciona Simyo? De momento no tengo ninguna pega. El tema de voz me funciona de maravilla, una buena tarifa a cualquier hora, y en cuanto al tema de datos todavía no he tenido ningún problema, me va a toda pastilla y con una cobertura buenísima. Además, muy económico.

De vez en cuando uso Google Maps en mi móvil, y el programa se conecta a internet para descargarse mapas, he estado viendo el consumo que se hace de datos y es muy económico (hoy he gastado 10 cts en mirar el mapa cuando iba a la visita de esta tarde).

De clientes, visitas y administradores


Qué compleja y que interesante es la psicología humana. Con más de doce años haciendo el mismo trabajo una ve los patrones que una y otra vez se repiten. Esta tarde tocó visitar a un super importante conglomerado de empresas dedicados a..... (sector muy importante). Me hacen entrar en una sala de juntas, una mesa enorme, una pizarra blanca con cifras, en la mesa una bolsa de caramelos sin azúcar abierta de mala manera, y un diario "La Vanguardia" doblado.

Al poco entran los dos administradores, un señor enorme, barba blanca, simpático (a no ser que lo contradigas) y el supremo administrador, sea cual sea el tema del que hable, el sabe más que nadie, además, siempre que puede aprovecha para hablar de los Paradores en los que ha estado. A su lado un responsable financiero de menor rango (en el argot, acompañante, a él le da igual el programa que le voy a enseñar, sencillamente suple la necesidad de compañía de su amado jefe).

Saco el portátil y comienzo la presentación comercial. Me han llamado por que están cansados de su programa actual, y porque ellos usan otro de nuestros programas con el que están la mar de contentos. No obstante tienen lo que yo llamo "el síndrome de la viuda". Un fenómeno muy español.

Imaginaros un tipo que era una mala persona en vida, maltratador, flojo, jugador, borracho, maleducado. A su esposa la tiene amargada, hasta que un día el señor va y se muere, y entonces, el día del entierro la desconsolada viuda grita "¡Ay qué pena!, ¡con lo bueno que era!".

Pues con los programas ocurre lo mismo, están hasta las narices de su proveedor actual, el programa que tienen ahora es caro, complejo, y no hace ni la mitad, pero ¡no para de acordarse de los buenos ratos que han pasado juntos!. Finalmente este cliente comprará nuestro programa, pero ahora viene la segunda parte: la traducción mental.

Aprender un nuevo programa conlleva: 1) tener una actitud receptiva 2) comprender que el sistema es nuevo, por lo que es el usuario el que se tiene que adaptar al sistema, y no al revés. Pues esto es lo que ocurre, el nuevo cliente está continuamente traduciendo el nuevo programa al antiguo (lo cual no está mal, pero le impide aprender correctamente) "en el programa de antes se hacía así". Lo peor es que si por ellos fuera intentarían cambiar nuestro programa para que hiciera las cosas de la manera que el otro las hacía, en fin, de hecho lo cambiarían tanto que se quedarían con el programa antiguo, pero... hay un problema, el programa antiguo les daba contínuos problemas.

Menos mal que con el tiempo, ese cliente será tremendamente fiel, pero nuestro trabajo nos ha costado.