16/9/13

Cargando el teléfono

Post Samsung mobile. No es la primera vez que veo esto, gente cargando el teléfono en los enchufes inaccesibles del Metro.

Vivir como James, la movilidad como castigo, no como forma de vida

Los que seguís las peripecias de James sabréis que el conocido video blogger vive en una movilidad impuesta, durmiendo en su coche (si es que a eso se le puede llamar dormir), aseándose en gimnasios y baños de gasolineras, comiendo judías en latas como Roscharch, y trabajando desde Starbucks, subiendo pesados vídeos desde la penosa conexión. Aún así, James sigue soñando, trabajando, presentándose a entrevistas de trabajo en las que tiene que averiguar qué dice el entrevistador, ya que aún no tiene los audífonos que le ayudan con su problema de audición.

No exagero cuando digo que James es un motivo de inspiración, por su humor, su ejemplo, y sus ganas de luchar, es un Urban survivor. Aquellos que lo están pasando realmente mal encontrarán en él un motivo para no sentirse solos y encontrar fuerzas, y aquellos cuyos problemas sean insignificantes en comparación con él, también hallarán motivación. Es cuestión de actitud mental, y de inspiración.

En la jungla urbana de hoy en día necesitas una conexión para sobrevivir, los currículums en las ciudad de Dallas se entregan, no en mano, sino por medio de webs de empleo y correos electrónicos. También las gestiones de impuestos, municipales, etc.... ¿y qué decir del alimento para la mente, la cultura, música, cine, el ocio en general?, tantas horas en un coche, tantas horas sin un techo, o una cama, hay que pasarlas de la manera más distraída posible, cuando no tienes nada productivo que hacer. Ahí está la conexión de Starbucks, o la que le proporciona su modesto pero eficaz teléfono ZTE.

Vivir en una ciudad en la que no tienes amigos debe ser indeciblemente duro, pero la red suple esa soledad relativa, James tiene buenos amigos que velamos por él, le ayudamos en la medida que podemos, y le mandamos mensajes de ánimo. Ojalá estuviera en alguna de nuestras ciudades, no le faltaría un ducha donde asearse con dignidad, un sofá donde descansar, o compartir una comida con un amigo. Pero eso no es posible, para eso tenemos la red, y eso no hace que nuestra amistad sea más pequeña, al contrario, es más fuerte, porque vence las distancias para hacerse igualmente cercana.

¿Te imaginas probar a vivir como James?. Sé del pastor de una iglesia que se impuso como reto vivir unos días como un homeless (sin hogar), solo unos días. La experiencia fue tan dura que está empleando buena parte de los recursos de su comunidad en ayudar a estas personas.

¿Te atreverías a vivir un par de días, quizás un fin de semana en una movilidad autoimpuesta, al estilo de James?, seguro que algo así nos ayudaría a valorar la increíble bendición que es un colchón, o a valorar la tranquilidad, de vivir sin el temor de que te roben, o que la policía te saque a gritos de tu entrecortado sueño, para esposarte y tratarte como a un criminal. Piénsalo.

Puedes visitar el canal de James, seguir su día a día, y de paso apoyarle suscribiéndote y dándole a "Me gusta" en sus vídeos, no te cuesta nada: Canal de Youtube de James Wallestein.