9/1/08

La mala suerte de Phillip K. Dick


Uno de mis autores de ciencia ficción favoritos (una vez superada mi fase Asimoviana) es Phillip K. Dick. Lo último que leí de él fué el primer volumen de los "Cuentos completos", y "Valis".

Me sorprende y me fascina como escritor, con temas recurrentes como las drogas, la clarividencia, la distorsión de la realidad, o un futuro delirante con una humanidad que no sabe qué hacer con su vida. Me encantan estos escritores sumamente prolíficos, es increíble su enorme obra (y lo que creo que se ha perdido, porque en su pequeña autobiografía cuenta cómo perdió un enorme archivador). Como persona no deja de ser interesante, un tipo excéntrico a niveles delirantes, una ruina humana, un lector obsesivo.

Pero lo que más me... indigna es el éxito que esta teniendo una vez muerto. Mucho más que el que tuvo en vida. He visto varias películas (algunas mejores que otras), mis favoritas son la genial "Minority Report", la sorprendente "A scanner darkly" (no me cansaré de verla) y recientemente he visto "Next" (no he leído el relato escrito en 1953 "El hombre dorado") y me ha encantado. Estoy deseando verla otra vez.
Me indigna que tanta gente esté ganando dinero con películas geniales (no, no me refiero a la infame "Paycheck" con un pésimo Ben Affleck), o sus herederos, pero no él. Aunque por otra parte no sé qué hubiera hecho con tanto dinero (a parte de gastarlo en anfetaminas y acelerar su muerte). No, no es justo tener éxito una vez muerto.

Hay una cita de P. K. Dick que me ha llamado la atención, y es que él dijo que no escribía historias de ciencia ficción, sino ideas, filosofía, y las envolvía de historias (la cita, como podéis ver no es textual, pero esa es la idea). Y eso es lo grande de este autor, marca una tendencia nueva, un camino que sólo él comenzó, nada de historias de marcianos, colonización, robots, sino los grandes misterios del alma humana (lee su peculiar visión en "La transmigración de Timothy Archer").

Mis libros favoritos son: "El hombre en el castillo" (un universo alternativo en el que los nazis y los japoneses ganan la 2ª guerra mundial y se reparten los EEUU) y un relato del primer volumen de cuentos titulado "El rey de los elfos", absolutamente hermoso, y con una insinuación de un tema dickinsoniano "¿el protagonista se está volviendo loco?".

Si queréis leer ciencia ficción de la buena, buscad en vuestra biblioteca pública a Dick. Vale la pena.


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