8/11/10

Ubuntu y los estudiantes

Este fin de semana estuve en Segovia, en concreto en La Granja de San Ildefonso. Las charlas que dí eran a estudiantes universitarios.

Pero bueno, a lo que iba. El chico que llevaba el tema de multimedia (presentaciones, proyección, vídeos) era un entusiasta del software libre. Cuando ví el escritorio que tenía, sinceramente, no pensé que fuera una distribución de Linux, así que le pregunté y él no dudó ni un segundo en comentarme las bondades de su Ubuntu. La verdad es que llamaba la atención el Escritorio que tenía, el tema, la disposición de iconos, si te fijabas bien podías darte cuenta de que era un Gnome sumamente personalizado.

La segunda cosa que me llamó la atención es el asunto de la proyección. El chico usaba Open Office para proyectar las diapositivas, pero trabajaba con varias, por ejemplo, en la pantalla estaba siendo proyectada una diapositiva mientras que él, en su escritorio estaba buscando otra que iba a poner, esto era sumamente útil, le pregunté cómo lo hacía y me comentó que con una extensión de Open Office.

No fué el primer caso que ví de estudiantes con Ubuntu. Otros había comprado portátiles en eBay (un chico chileno me comentó que compró un Thinkpad el cual, a pesar de sus maltratos resistía lo indecible). Luego está el caso de mi hermana pequeña (también en la Universidad) que ha sido "ubunteada".

Y es que Ubuntu ha sido el impulso que el software libre necesitaba. Quizás hace unos años no estaba demasiado preparado para el usuario final. Aún recuerdo cuando instalé mi primera distro Linux "Conectiva" y tardé horas en aprender cómo montar el CD. De esos tiempos nada lejanos a lo que ahora tenemos ha habido un salto impresionante. Ubuntu es más sencillo de instalar que cualquier Windows y no sólo causa menos dolores de cabeza, sino que viene con software suficiente para ponerse a trabajar con él.

Mi gran pregunta es ¿qué pasará cuando a Mark Shuttleworth se le acabe el dinero?, ¿que nuevo filántropo resucitará los viejos ideales?.