10/3/16

Samsung S7 Edge como único dispositivo

Pues nada, que me lío la manta a la cabeza y meto el iPhone 6s Plus en un cajón para usar el S7 Edge como único dispositivo. Al fin y al cabo eso es lo que quiero: probarlo. Y probarlo a fondo. Quizás el malvado virus que iOS me ha inoculado en el cerebro me crea una enfermiza dependencia del sistema manzanero, pero ¡lo he vencido!, al menos por ahora, con las manos temblorosas y la frente sudada, he sacado la NanoSIM y como si fuera el transplante de hígado de Frank Underwood he pasado esa SIM al S7. He cerrado la bandeja y he respirado, quitándome la mascarilla.

Ahora estoy en Corea del sur, en el universo Samsung, ¿o estoy en el mundo Android?, es confuso.

Los próximos días veréis mis vídeo blogs, mis podcast, e incluso mis post escritos desde este dispositivo de pantalla curva con el que todavía no me termino de hacer. Sí, siento emoción, pero también la ansiedad del que se sabe adicto, enganchado a esa dosis de sistema operativo cerrado, de esa cárcel sin sistema de ficheros, pero donde todo funciona bien. No echo de menos cosas que no tengo, puede que ahora comienze a abrir los ojos. O no, puede que siga siendo un adicto.