Escrito con la app Ulysses.
Permitidme que os hable como el escritor aficionado de CF que llevo dentro. No creo en la IA. O dicho de otra manera. No creo en HAL 9000, o lo que vemos en HER. Es más, creo que nunca lo veremos.
Cuando tengamos mejores procesadores, mejores lenguajes, mejores librerías y montañas de datos que Google y otros nos han ido sacando a lo largo de los años, entonces tendremos mayordomos digitales muy eficaces. Software que obedecerá nuestros deseos y nos liberará de penosas tareas.
Las IA del futuro próximo serán como superdotados autistas a los que sólo puedes darle un cubo de rubik o una tarea compleja con la que se sentirá feliz. No nos hará compañía, no empalizará con nosotros. ¿Para qué servirán las próximas IA?.
Si ahora mismo una IA (primigenia) calcula la ruta en bici que tengo que tomar para ir a algún sitio de Madrid, las nuevas IA calcularán rutas de navegación más eficientes, calcularán la rentabilidad de una empresa, prescribirán tratamientos médicos básicos, serán capaces de montarte una fábrica y la gestionarán ellas solas, podrán equilibrar el presupuesto de un país, hacer la ingeniería de las nuevas naves espaciales, o crear mejores procesadores, podrán organizarnos al detalle nuestras vacaciones, organizar la mudanza (buscar casa, matricular a los niños en la escuela, dar de alta los suministros, organizar la mudanza), podrán recibir llamadas, atender pedidos, cuidar de las cámaras de seguridad y alertar sobre violaciones de la ley, diseñar un barrio entero (edificios, saber cuanta policía hará falta, hacer el diseño de cañerías, sistemas eléctricos, carreteras, semáforos, todo), y hacerlo mejor que nosotros.
Le pedirás que llame a un taxi, que contrate a una niñera para el miércoles de ocho a doce, que pida 7 menús de comida china a casa para cuando llegues del taxi, y que avise a tu grupo de amigos que venga a ver el fútbol a tu casa. Todo en una sencilla orden.
Eso sí, no les pidas que te psicoanalice, que os enfrasquéis en una amena conversación sobre cine, fútbol, o lo que sea. La IA es y será un mayordomo, no un amigo.
Por un lado todo esto nos simplificará mucho la vida. Es como tener una secretaria que lleva tu agenda, hace tus reservas, te recuerda cosas importantes, y contrata servicios que necesites, además de llevar a cabo la tediosa tarea de avisar a tus amigos y ponerlos a todos de acuerdo para, por ejemplo, una escapada o una fiesta de cumpleaños sorpresa. A nivel de trabajo serán MUY útiles, hay ciertas tareas cotidianas que son repetitivas. Por ejemplo, he dedicado toda la mañana a modificar una serie de 14 vídeos porque en ellos había que reemplazar un segmento de vídeo de unos 4 segundos. Es una tarea fácil, pero monótona. Podría haberle dicho a la IA: “modifica tal segmento en los vídeos 1 a 14 y vuelve a crear los vídeos, los colocas en tal carpeta y la compartes con tal contacto, además lo avisas por WhatsApp de que ya lo tiene”. Listo. Otra tarea que he tenido que hacer esta mañana es organizar tres reuniones con tres clientes diferentes. Eso implica llamarles, que estén disponibles….. lo sencillo hubiera sido que mi mayordomo IA se hubiera puesto en contacto con los otros mayordomos y se hicieran las citas, se hubieran cargado en nuestros Google Calendar y avisado. Una mañana entera de trabajo. Podríamos ser mucho más productivos.
Hay un lado negativo, la pérdida de empleos. Si ahora una persona puede hacer el trabajo de cuatro, ¿qué pasa con las otras tres personas?. Ok, eso ya lo hemos visto con la llegada de la informática. Antes un contable podría hacer X cosas. Desde que se informativo todo, con un buen programa contable ese contable puede hacer X + 7 cosas. Y de forma más cómoda y precisa. Por cierto, la contabilidad y el cálculo de impuestos es otra cosa que las IA harán de maravilla. Habrá IAs contables que te asesorarán sobre tus finanzas, harán tu declaración de la Renta de la forma más ventajosa, se ocuparán de hacer inversiones, de hacer las amortizaciones de hipoteca, de mover tu plan de pensiones a fondos más rentables… Más comodidad, más productividad, menos contables y asesores fiscales en el mundo. Más adelante surgirán nuevos sectores de oportunidad, habrá mucho más ocio, y gastaremos mucho más en temas como salud, vacaciones, entretenimiento, se valorará más la creatividad, el trabajo de artistas, de guionistas, de músicos.
Tenemos el asunto del nivel 5 de conducción automática. Es decir, IA chófer, que llevarán vehículos eléctricos, taxis, camiones, vehículos de pasajeros… eso cambiará el aspecto de nuestras ciudades. Serán mucho más limpias, el tráfico será mucho más fluido, menos atascos, menos personas se comprarán un vehículo en propiedad. Las avenidas y aceras serán mucho más anchas, organizando el mapa de la ciudad para que adaptarlo a la forma de conducir de las IA.
Ahora mismo la humanidad está al borde de un abismo de cambio. Cambios que van a afectar directamente a la manera en la que vivimos, trabajamos, nos divertimos. Cambios que afectarán a casi todo.