Llegada a Bilbao

Esta foto es de la Q9 en la T4. ¡Agua!.

Lo bueno es que todo funcionó correctamente, sin retrasos, ni pilotos que llegaban tarde, ni tiroteos en la T4. Con todo, esto de los aeropuertos es un auténtico aburrimiento, a no ser que tengas un buen libro, o seas un flipado de internet (o ambas cosas). Yo me dediqué a seguir investigando con la Q9.

Evidentemente esta foto no la hice con la Q9.

El vuelo se me pasó muy rápido, apenas una hora en lo que lo único interesante es el despegue y el aterrizaje, porque al ser de noche no hay nada que ver (no, no aparecieron luces no identificadas que iban a una velocidad absurda). Me encanta ir en avión. Cuando era niño, en las atracciones de la feria de Sevilla había una especia de lanzadera espacial donde te metías dentro y te ponían una película mientras la nave inclinaba el morro arriba y abajo. Finalmente en la película (bastante cutre y setentona, lo cual la hacía fascinante) la nave se estrellaba y el espectáculo terminaba. Aquello me parecía el espectáculo total (a pesar de los asientos destrozados y los cinturones asaltados por vándalos). Cuando me metó en un avión tengo esa misma sensación, la de atracción de feria.

Vídeo de cámara oculta, si se ve mal es que la Q9 no da más de sí.

Cuando llegué había pocos taxis, pero rápidamente me sentí como en casa, 25 Euros me costó llegar al hotel, vamos, como si estuviéramos en Madrid. El hotel es el mismo del año pasado, y aunque la habitación no es la misma, es como si hubiera vuelto al año pasado, porque todo es idéntico (como en cualquier cadena hotelera). Con todo, me encanta el hotel, para mí es fundamental que el hotel tenga moqueta, y este la tiene. Las moquetas me dan buen rollo.

Cuando un hotel te habla, es el momento de escribir sin parar "No por mucho madrugar, amanece más temprano". (Oscura referencia para los amantes de Stephen King).

A la llegada, la tele me saluda "Bienvenido Sr. Martínez", pero cuando enciendo el portátil es Telefónica quien me saluda y me dice "nosotros también te damos la bienvenida, si quieres una hora de internet ve metiendo los datos de la VISA, que nos vamos a reír juntos". Vamos, lo mismo que en Logroño.